Dicha por el poeta alemán Bertolt Brecht refiriéndose a la llegada de los nazis, creo que no existe mejor frase que nos muestre lo que nos puede llegar a pasar si no defendemos la Paz a toda costa y con todos los medios que tengamos al alcance.
Si miramos impasibles como la violencia y los violentos destruyen la vida, la paz y al mundo, nos convertiremos en cómplices de estos atroces crímenes, seremos parte del problema, seremos egoístas con nuestros compañeros, con la Humanidad.
No podemos permitir que eso pase, no podemos caer en la comodidad de la rutina, debemos luchar y movernos por la paz, debemos oponernos a la violencia y sus muchísimos derivados y seguidores.
Porque la salvación propia viene de la solidaridad con el ajeno, con aquellos que sufren y aquellos que mueren. Porque todos somos humanos, todos merecemos el mismo respeto, los mismos derechos, todos merecemos la paz, la libertad, el respeto y la vida y nadie debe jamás quitarnos esos cuatro derechos fundamentales. Y da igual donde vivamos, que idioma hablemos, a que Dios le recemos, todos somos humanos, todos somos iguales.
Si miramos impasibles como la violencia y los violentos destruyen la vida, la paz y al mundo, nos convertiremos en cómplices de estos atroces crímenes, seremos parte del problema, seremos egoístas con nuestros compañeros, con la Humanidad.
No podemos permitir que eso pase, no podemos caer en la comodidad de la rutina, debemos luchar y movernos por la paz, debemos oponernos a la violencia y sus muchísimos derivados y seguidores.
Porque la salvación propia viene de la solidaridad con el ajeno, con aquellos que sufren y aquellos que mueren. Porque todos somos humanos, todos merecemos el mismo respeto, los mismos derechos, todos merecemos la paz, la libertad, el respeto y la vida y nadie debe jamás quitarnos esos cuatro derechos fundamentales. Y da igual donde vivamos, que idioma hablemos, a que Dios le recemos, todos somos humanos, todos somos iguales.
Nuestro objetivo aquí no es únicamente celebrar el día de la Paz, es sobre todo defender el derecho universal a la vida, al respeto y a la libertad de todos los ciudadanos del mundo porque en eso consiste la Paz. Imaginad por un momento como serían vuestras vidas si vuestro barrio o ciudad fuese bombardeado, si no estuvieseis seguros de que al día siguiente vais a poder comer o incluso de no saber si seguiréis vivos cuando acabe el día.
Eso es vivir en guerra, vivir en la miseria, vivir encerrados y desgraciadamente así viven millones de personas en todo el mundo.
Eso es vivir en guerra, vivir en la miseria, vivir encerrados y desgraciadamente así viven millones de personas en todo el mundo.
Por esas personas y por nosotros mismos debemos luchar por la Paz, pero no con armas ni con insultos, sino levantando nuestras voces, nuestros espíritus, manifestándonos y uniéndonos y siempre dando ejemplo, no lograremos nuestro objetivo sino damos ejemplo. Si entre nosotros mismos nos peleamos ¿que derecho tenemos a protestar por la violencia? Ninguno, la violencia solo trae más violencia, no existe solución a los problemas ni a las guerras con más violencia.
Porque la Paz no se rompe una vez cada cierto tiempo. La Paz siempre tiene muchas fisuras y grietas. No las vemos, no las escuchamos, pero esas grietas y fisuras, esas heridas, existen y siempre están ahí.
Existen y han existido a lo largo de la historia demasiado ejemplos del derrumbamiento de la Paz pero sin lugar a dudas uno de los peores es el conflicto que enfrenta a Palestina e Israel, que hace menos de dos semanas se llevo la vida de más de 1500 personas. Pero este conflicto es muy llamativo, la mayoría pasan desapercibidos ante nuestros ojos y oídos, sus muertos no salen en periódicos y en ocasiones ni si quiera tienen tumba.
Estas son las guerras de África, guerras movidas por los intereses económicos y subvencionadas por armas de naciones desarrolladas como muchos países europeos.
Son estas actitudes y acciones las que debemos cambiar para garantizar la Paz en el mundo, el pueblo tenemos más fuerza de lo que pensamos si unimos nuestras ideas y voces.
Existen y han existido a lo largo de la historia demasiado ejemplos del derrumbamiento de la Paz pero sin lugar a dudas uno de los peores es el conflicto que enfrenta a Palestina e Israel, que hace menos de dos semanas se llevo la vida de más de 1500 personas. Pero este conflicto es muy llamativo, la mayoría pasan desapercibidos ante nuestros ojos y oídos, sus muertos no salen en periódicos y en ocasiones ni si quiera tienen tumba.
Estas son las guerras de África, guerras movidas por los intereses económicos y subvencionadas por armas de naciones desarrolladas como muchos países europeos.
Son estas actitudes y acciones las que debemos cambiar para garantizar la Paz en el mundo, el pueblo tenemos más fuerza de lo que pensamos si unimos nuestras ideas y voces.
Para despedirme solo decíos a todos vosotros, estudiantes y profesores de La Línea, moveos por la paz y la vida, sed solidarios con vuestros compañeros. Defendamos todos juntos la paz y destruyamos con el poder de la palabra y el diálogo la violencia y las injusticias del mundo.